1° Parte

En este último caso diría que en un porcentaje, si efectivamente la satisfacción del cliente es uno de los tantos parámetros valiosos a tomar en cuenta, pero solo desde el aspecto comercial del servicio. Esto lo menciono como centro de la nota por que los especialistas en higiene somos nosotros, no el cliente, por ende los parámetros  que deberemos satisfacer primero son los especificados por nuestro departamento técnico para que como consecuencia  tengamos asegurada la calidad de nuestra limpieza.  Evidentemente es imprescindible contar con el soporte técnico “Asesoramiento” y/o Capacitación necesaria para conocer cómo enfrentar con la estrategia más eficaz y eficiente las problemáticas de higiene que se planteen en nuestro cliente.

El conocimiento claro de:

■ Tipo de suciedades.
■ Sobre que superficies.
■ Técnicas permitidas o posibles de limpieza.
■ Nivel de exigencia del rubro (No es lo mismo, Higiene de un Hospital que la Limpieza de un Hotel).
■ Conceptos claros de Limpieza, Higiene, Saneamiento, Esterilización, Desinfección. Para determinar claramente nuestro alcance.
■ Huésped (concepto de usuario de nuestra limpieza).

Podría continuar esgrimiendo una variedad más amplia aún de parámetros a conocer con claridad, pero ya los veremos más adelante en próximas notas por rubro.
El concepto de calidad debe aplicarse en nuestro caso no solo en el control de la tarea efectuada, sino en cómo debo efectuar la limpieza construyendo la calidad en cada paso por esto es imprescindible el conocimiento, él porque estoy haciendo cual o tal cosa, con el objetivo claro que la calidad la debemos hacer, no solo controlar, es más, es más importante hacerla que controlarla porque allí estaríamos hablando de Productividad en nuestro trabajo, no solo estamos cumpliendo con los requisitos hacia el cliente, sino también colocamos a nuestra tarea en un equilibrio productivo donde el costo y la rentabilidad se optimizan asegurando la sustentabilidad de mi empresa.

Para que podamos cumplir con esta filosofía de trabajo, debemos saber con precisión:

■ Los métodos alternativos de limpieza.
■ La diversidad de productos, función y característica.
■ La variedad de suciedades, como eliminarlas e identificarlas.
■ Microorganismos patógenos y el modo de combatirlos.
■ Prevención para el personal afectado al trabajo.
■ Las superficies, características y rango de tolerancia.
■ Los Equipos (Máquinas y Utensilios) y la aplicación específica de cada uno.
■ Concepto de Contaminación Cruzada.
■ Los Tratamientos de Ennoblecimiento de Superficies.

Son tantas las variables que intervienen en la evaluación de un método de limpieza que no solo es una ciencia sino que intervienen varias especialidades, La Química, La física, La Mecánica, La comunicación, La electrónica, etc. Que evidentemente, sin lugar a duda, los que llevan a cabo la tarea, son profesionales o debe transformarse en Profesionales en Limpieza e Higiene y para esto la Capacitación y el asesoramiento es de vital Importancia.

Por Daniel Nielsen
Titular de Química consultora

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